Anoche, en un abarrotado Ateneo de Madrid, dos emblemáticos políticos españoles, Alfonso Guerra y Felipe González, se unieron para presentar el libro «La rosa y las espinas», escrito por el exvicepresidente del Gobierno durante la primera mitad de la era felipista. Sin embargo, lo que hizo este evento aún más relevante fue su compromiso conjunto en la defensa de la democracia española y su rechazo a los supuestos enjuagues separatistas impulsados por Pedro Sánchez y su propuesta de amnistía para los líderes catalanes fugitivos, encabezados por Carles Puigdemont.
Alfonso Guerra, con su característica franqueza y claridad, destacó que la amnistía propuesta por el actual presidente en funciones no solo sería inaceptable políticamente, sino que también entraría en conflicto con la Constitución española. Argumentó que la amnistía equivaldría a borrar la responsabilidad de aquellos que llevaron a cabo acciones que atentaron contra la unidad de España y la legalidad vigente. Para él, este intento de amnistía sería una «estafa», destinada a satisfacer los caprichos de Pedro Sánchez y asegurar el apoyo de Juntos por Cataluña en su investidura.
Guerra señaló que la amnistía representaría la humillación deliberada de la generación que vivió la Transición, un período crucial en la historia española en el que se logró la reconciliación y la instauración de la democracia. Para él, la amnistía sería una ruptura de la democracia y una condena a los españoles que respaldaron la Constitución de 1978, que deseaban acuerdos entre los partidos que defendieran la Carta Magna. Además, Guerra argumentó que la amnistía significaría la negación de la responsabilidad por los actos cometidos, lo que equivale a afirmar que no se cometieron delitos, una posición que ningún demócrata puede aceptar.
Por su parte, Felipe González respaldó las palabras de su antiguo compañero de gobierno y fue aún más lejos al criticar a la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz. González la acusó de dar lecciones a otros políticos, como Alberto Núñez Feijóo, quien le ganó en las últimas elecciones en Galicia. González señaló que Díaz no debería ser tan presuntuosa al criticar a otros cuando ella misma sufrió una derrota electoral significativa. Este comentario resaltó la importancia de la coherencia y la humildad en la política y subrayó la necesidad de un diálogo constructivo entre las diferentes fuerzas políticas.
En resumen, la presentación del libro de Alfonso Guerra en el Ateneo de Madrid se convirtió en un colosal alegato en defensa de la democracia española y en contra de la propuesta de amnistía de Pedro Sánchez. Guerra y González recordaron la importancia de la Constitución de 1978 y la necesidad de mantenerla como fundamento de la democracia española. Además, el evento sirvió como recordatorio de la importancia del diálogo y la reflexión en la política, en contraposición a la presunción y la confrontación. Estos veteranos políticos españoles nos dejaron claro que, ante los desafíos actuales, la defensa de los principios democráticos debe ser una prioridad.
