En un esfuerzo por proteger a los ciudadanos de Mallorca de un fuerte incremento en la tarifa de residuos sólidos urbanos (RSU), el presidente del Consell de Mallorca, Llorenç Galmés, anunció una inversión de 43 millones de euros para mantener la tarifa en 114 euros por tonelada en 2024.
La concesionaria Tirme había propuesto inicialmente una tarifa de 225 euros por tonelada, lo que significaría un aumento del 97,4%. Sin embargo, con una inyección de 43 millones de euros, de los cuales 32 millones provienen directamente del Consell y 11 millones adicionales son un anticipo del Govern balear, se logra contener este alza.
Galmés destacó que la prioridad ha sido asegurar que los residentes no soporten el «coste de la irresponsabilidad y la nefasta gestión del anterior equipo de gobierno». Esta inversión será sometida a aprobación en el próximo Pleno del 9 de noviembre.
El compromiso del Consell se extendió hasta conseguir que la propia concesionaria, Tirme, aportara 5,1 millones de euros para enfrentar el incremento.
El presidente del Consell apuntó críticas al «pacto de izquierdas» al mencionar que aprobaron una tarifa irreal basada en previsiones igualmente irreales, en lo que considera un intento de ganar popularidad electoral. Aclaró que, de hecho, la tarifa real de 2023 era de 138 euros por tonelada y no los 114 que se establecieron.
Pedro Bestard, vicepresidente segundo y consejero de Medio Ambiente, Medio Rural y Deportes, subrayó el esfuerzo mancomunado para evitar que los ciudadanos se vean afectados por el incremento tarifario.
La Dirección Insular de Residuos indicó tres factores externos que impulsaron al alza la tarifa en 2024:
Incremento del IPC: Con las subidas recientes, la tarifa se habría fijado en 162,56 euros en lugar de los actuales 114,95 euros.
Subida del euríbor: Afecta en gran medida las inversiones financiadas por Tirme y representa casi el 50% del total de la tarifa.
Retiro de subvenciones a energías renovables: Este decreto ha ocasionado una pérdida de 12 millones de euros para Tirme en ingresos provenientes del Gobierno central.
Dado este escenario y las externalidades presentadas, el Consell de Mallorca ha tomado medidas para evitar que la «tormenta perfecta» de factores recaiga sobre los ciudadanos. Gracias a estos esfuerzos conjuntos, la tarifa de residuos para 2024 permanecerá sin cambios, protegiendo el bolsillo de los mallorquines en estos tiempos difíciles.