El informe reciente de la OCDE arroja luz sobre la situación económica de España tras la pandemia, destacando un aspecto preocupante: la recuperación de la renta disponible de las familias españolas no solo va por detrás de la recuperación del PIB, sino que además se ve afectada negativamente por las subidas de impuestos. España se ha convertido en el país de la OCDE donde más han aumentado los impuestos a los hogares en los últimos años, lo que ha tenido un impacto directo en la renta disponible de las familias.
En el tercer trimestre de 2023, los hogares españoles pagaron en impuestos un 59% más que lo que abonaban en el último trimestre antes de la pandemia, una cifra significativamente superior a la observada en países como el Reino Unido, Alemania y Francia. Este incremento de la carga fiscal ha contribuido a que la renta disponible de los hogares españoles no haya recuperado aún los niveles previos al COVID-19, a pesar de que el PIB per cápita del país ya haya superado esa marca.
La situación es particularmente relevante en comunidades como las Islas Baleares, donde el impacto de la política fiscal del gobierno de Sánchez está exacerbando las dificultades económicas de las familias. El fuerte aumento de los impuestos, sumado a otros factores como el coste de la vida y la dependencia del turismo, que ha sido volátil durante la pandemia, sugiere que la recuperación económica no se está traduciendo en un alivio palpable para los hogares de las islas.
Además, la OCDE ha puesto de relieve que, aunque la tendencia general de la renta de los hogares es ascendente, las medidas redistributivas del gobierno no parecen ser suficientes para compensar la pérdida de ingresos debido a los aumentos fiscales. El informe sugiere que mientras el PIB per cápita se sitúa ligeramente por encima de los niveles previos al Covid, la renta disponible de los hogares está, por el contrario, ligeramente por debajo, lo que indica que el crecimiento económico no se está distribuyendo de manera equitativa entre la población.
A pesar de los anuncios del gobierno de Sánchez en cuanto a recuperación económica en las Islas Baleares la realidad de las familias es bien distinta, más presión fiscal y menos poder adquisitivo que antes de la pandemia.