En la víspera de las Elecciones Europeas, Marine Le Pen (Identidad & Democracia) ha propuesto a Giorgia Meloni (Conservadores y Reformistas Europeos) fusionar sus respectivos grupos para crear el segundo mayor bloque en el Parlamento Europeo, solo por detrás del Partido Popular Europeo (PPE).
Una fusión estratégica en el panorama político europeo
Marine Le Pen ha aprovechado el reciente evento Europa Viva, organizado por VOX en Madrid, para extender la mano a Giorgia Meloni. Esta propuesta llega tras la expulsión de AfD del grupo Identidad & Democracia (ID), lo que ha abierto nuevas posibilidades de alianzas en el seno de la nueva derecha europea.
VOX: Un catalizador de la cohesión conservadora en Europa
El partido español VOX, miembro del grupo Conservadores y Reformistas Europeos (ECR), ha jugado un papel crucial en la reciente cohesión de la nueva derecha en Europa. Bajo el liderazgo de Jorge Buxadé, quien ostenta la vicepresidencia de ECR, VOX ha logrado tejer alianzas tanto con formaciones de ID como con partidos no inscritos, como Chega, Fidesz y el propio RN de Le Pen.
Una coalición que cambiaría el equilibrio de poder
De concretarse la fusión, el bloque resultante se convertiría en la segunda fuerza más grande del Parlamento Europeo. Esta nueva configuración política podría modificar significativamente el equilibrio de poder en la Unión Europea, consolidando a la nueva derecha como una fuerza política robusta y cohesionada.
Retos y oportunidades
A pesar de las oportunidades, esta fusión también enfrenta retos. La diversidad de posturas entre los partidos involucrados, especialmente en cuanto a su relación con Rusia, podría ser un obstáculo. Mientras partidos como Fidesz, AfD y Konfederacja muestran inclinaciones prorrusas y permanecen como no inscritos, otros como PiS y Meloni mantienen posturas más críticas hacia Moscú. VOX, que ha optado por una postura más neutral respecto al conflicto entre Rusia y Ucrania, podría jugar un papel mediador en este proceso.
El papel de VOX en la nueva coalición
La habilidad de VOX para reunir a líderes con posturas divergentes, desde el libertario Javier Milei hasta la estatista Le Pen y pasando por líderes con diferentes alineaciones geopolíticas como Orbán y Meloni, demuestra su capacidad para servir como un puente entre las diversas facciones de la nueva derecha europea.