Sobre las 16:00 horas del pasado miércoles, la Base del 092 comisionó dos dotaciones de la Unitat de Seguretat Integral (USEI) a un edificio ocupado de la calle Can Espanya, en donde había una pelea entre un número indeterminado de personas. Una vez allí, los agentes encontraron a cinco personas discutiendo a gritos y procedieron a separarlos para escuchar sus versiones.
Los requirentes, dos ciudadanos colombianos de 27 años, manifestaron que eran okupas de un piso ubicado en ese edificio y que otra vecina, también allí presente, les avisó que había visto a una pareja entrar en su domicilio forzando la puerta. Al entrar en su casa, encontraron a un hombre portando una vara de un metro y una mujer con una herida sangrante en la mano. Al indicarles que abandonaran la casa, la pareja se negó a hacerlo y se inició un forcejeo. En ese momento que hicieron acto de presencia las unidades policiales y separaron a las partes en conflicto.
La pareja, un hombre rumano de 33 años y una mujer brasileña de 40 años, manifestaron que residían allí hace más de medio año y que ahora lo hacían en un piso próximo del cual habían perdido las llaves; como el lugar de los hechos es colindante a su nuevo domicilio, pretendían acceder desde una ventana.
Tras consultas con la Base del 092, pudieron saber que, por distintos motivos, la pareja incumplía sendas órdenes de alejamiento. El varón no podía acercarse a la mujer por un caso de Violencia de Género y esta, a su vez, no podía hacerlo a un negocio de restauración próximo a donde ella se encontraba.
Por todo ello, fueron detenidos por presuntos delitos de allanamiento de morada, quebrantamiento de medidas cautelares y delito leve de daños. La División de Policía Judicial (DPJ) se hizo cargo del atestado.
Tras haber sido puestos a disposición judicial, ambos quedaron en libertad con cargos.
Cabe destacar que la víctima de Violencia de Género presenta una valoración de riesgo medio, por lo que se activaron las medidas de protección establecidas en el protocolo VIOGEN.