La Conselleria d’Educació i Universitats y la Conselleria de Salut, junto con el Colegio Oficial de Psicólogos de las Islas Baleares (COPIB), han establecido las bases para que todos los centros de educación secundaria (IES), los centros integrados de formación profesional (CIFP) y los centros de educación especial (CEE) cuenten con la presencia de un profesional de la Psicología durante el curso 2024-2025.
A partir de las necesidades detectadas en los centros de educación secundaria obligatoria se impulsan medidas vinculadas a la prevención, basadas en la promoción de la salud mental y el bienestar emocional a las aulas.
En esta medida han trabajado conjuntamente la Dirección General de Primera Infancia, Atención a la Diversidad y Mejora Educativa de la Conselleria d’Educació i Universitats, el Instituto Balear para la Salud Mental de la Infancia y la Adolescencia (IBSMIA) —que depende de la Conselleria de Salut— y el COPIB. Hoy se ha presentado la iniciativa en una rueda de prensa en la que han estado presentes el conseller d’Educació i Universitats, Antoni Vera; la consellera de Salut, Manuela García; la directora general de Primera Infancia, Atención a la Diversidad y Mejora Educativa, Neus Riera; la doctora Isabel Flórez, directora del Instituto Balear para la Salud Mental de la Infancia y la Adolescencia, y el decano del Colegio Oficial de Psicólogos de las Islas Baleares, Javier Torres.
Las funciones de los profesionales de la Psicología que atenderán los centros de secundaria durante este curso escolar tendrán tres líneas de actuación: hacia el alumnado, hacia el equipo educativo y hacia las familias de los alumnos. Desde la Conselleria d’Educació i Universitats, la Conselleria de Salut y el COPIB se ha velado en todo momento para que las funciones de los orientadores educativos, las de los profesionales del IBSMIA y las de la nueva figura de los psicólogos educativos sean compatibles.
Los psicólogos educativos ofrecerán espacios de escucha, acompañamiento, ayuda o intervención al alumnado en situaciones de riesgo y malestar emocional, excepto los casos con protocolo de riesgo autolítico activado, los cuales se enmarcan en el convenio activo con el COPIB por estos casos específicos.
Además, los psicólogos educativos entrenarán los adolescentes en la gestión emocional positiva o en técnicas relacionales, como las habilidades sociales o la resolución de conflictos, entre otras funciones.
En cuanto a la relación con el equipo educativo, los psicólogos educativos establecerán espacios y rutas de coordinación estrecha con los servicios de orientación del centro para favorecer el intercambio correcto de información. También colaborarán con los servicios de orientación en el diseño y la aplicación de programas de prevención en cuanto a la gestión emocional y la convivencia positiva, y también en la propuesta de actividades formativas para el profesorado, enfocadas a la prevención de la salud mental y el bienestar emocional en el ámbito educativo.
En la relación con las familias, los psicólogos las acompañarán y ofrecerán espacios de escucha, ayuda o intervención psicológica, si es necesario —excluidos también los casos con protocolo de riesgo autolítico activado—. Además, entre otras funciones, también colaborarán con los servicios de orientación del centro en propuestas de actividades formativas e informativas para las familias en cuanto a la prevención de la salud mental y la convivencia positiva.
Un equipo de coordinación y gestión de casos de salud mental, creado recientemente por la Dirección General de Salud Mental y formado por cuatro profesionales, darán apoyo al trabajo desarrollado por los psicólogos educativos.
Para el curso 2024-2025 habrá una plantilla de 39 profesionales de la Psicología que se repartirán entre los 11 CIFP, los 70 IES y el centro de educación especial que hay en las Islas Baleares. La figura del psicólogo educativo será compartida entre varios centros, basándose en criterios como la cantidad de alumnos o la cantidad de protocolos abiertos en cada centro. La inversión total de esta medida para el curso 2024-2025 es de aproximadamente 2 millones de euros que pagará íntegramente la Conselleria d’Educació i Universitats.
Por islas, Mallorca dispondrá de 30 psicólogos (51 IES, 9 CIFP, 1 CEE), Menorca tendrá 3 (1 CIFP, 7 IES) y Eivissa y Formentera tendrán 6 (12 IES, 1 CIFP).
Desde el Instituto para la Convivencia Escolar (CONVIVÈXIT), que depende de la Dirección General de Primera Infancia, Atención a la Diversidad y Mejora Educativa de la Conselleria d’Educació i Universitats, se llevan a cabo una serie de formaciones para los psicólogos educativos y también para los orientadores con el fin de estar preparados para el inicio del nuevo curso escolar.